El Tren Maya es un proyecto realizado por el gobierno de México que pretende conectar zonas turísticas y habitacionales del sur del país. Todos los kilómetros recorridos por el tren tendrán un impacto ambiental alarmante, sobre todo en el tramo 5, que abarca 49.8 km, de Cancún a Playa del Carmen. Este proyecto se contradice en varios de los supuestos del Reglamento de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA) y diversas ONG han denunciado que esta ruta está destruyendo la flora y fauna, también hay daños en cavernas, lagunas y cenotes. Además, este será alimentado con diésel en un 60% y electricidad un 40%, los cuales no son energías limpias en lo absoluto.
El 10 de agosto, Greenpeace México publicó en sus redes sociales una serie de datos que explican por qué el tramo 5 es ilegal, entre los cuales se destacan:
- No se presentó la Manifestación de Impacto Ambiental antes de comenzar las obras, lo cual incumple con lo estipulado en el artículo 28 de la LEGEEPA.
- El estudio de mecánica del suelo se hizo sobre el tramo anterior (originalmente, el tramo 5 pasaría por el viaducto elevado).
- El tramo 5 pasará por el hábitat de especies protegidas por la NOM059. ¿qué especies?
Además de los innumerables impactos negativos en el medio ambiente, el ecosistema, la flora y fauna, y las consecuencias sociales; desde lo que se han podido contabilizar, medir y pronosticar, hasta los que surgirán conforme continúe la construcción y años después; poco se ha hablado del impacto en la sociedad que conlleva que el gobierno mexicano haya tomado esta decisión. A pesar de las inconformidades y el argumento de que es un acto inclusive inconstitucional, no se ha demostrado una verdadera preocupación por parte del estado sobre qué sucederá en términos medioambientales y tampoco han sido transparentes en las verdaderas consecuencias que este conlleva. El estado es el organismo que representa a una región, y la cara y voz ante otros países, pero, sobre todo, debe de ser un ejemplo para la ciudadanía de cómo debe de actuar el mexicano. Más allá de las consecuencias tangibles, es un retroceso en la narrativa que acerca al mexicano a cuidar su medio ambiente, si el gobierno no procura el mismo, ¿por qué los empresarios, trabajadores y los padres y madres de familia lo harán?
Es un parteaguas para que se perciba al cuidado de un medio ambiente como un tema no prioritario para el mexicano,a pesar de todos los avances de México en el ámbito de la sustentabilidad, y después de ser considerado de los países con mejores acciones y estrategias en Latinoamérica. El cuidado ambiental no solo es importante sino urgente para garantizar la calidad de vida a las generaciones futuras. Todas las acciones en pro de su cuidado abonan, pero para el estado deben de ser obligatorias y el hecho de ir en contra no solo impacta en el país como región, también en la calidad de vida de sus actuales habitantes, en su entendimiento y acciones individuales ante el tema e incluso en la educación ambiental que se les brinde a los jóvenes.
Escrito por Michelle Servin.
