Una empresa europea de ropa maquila sus productos en China con recursos de Bangladesh y vende sus productos en México y en todo el mundo, excepto en China y Bangladesh. El ejemplo, si bien simplificado, es una muestra de cómo trabajan muchas de las grandes corporaciones en la actualidad; todas bajo la idea del viejo paradigma de reducción de costos y rapidez en la producción. En resumen: entre más rápido y más barato, mejor.

Sabiendo todo esto, entonces debemos formularnos la pregunta: ¿en dónde radica la clave de la Responsabilidad social para estos modelos de producción? ¿En dónde la responsabilidad puede ser un término que entienda toda entidad global? Existen claves que hacen a la Responsabilidad social verdaderamente única. Las claves la hacen diferente a otras herramientas y a otros momentos en la historia de la empresa. Y es importante ver que estas claves no radican exclusivamente en: 1) la buena voluntad de las personas, 2) reformas políticas estrechas y 3) ideología moralista de las empresas.En cambio, la clave de la Responsabilidad social radica en que por primera vez en la historia, las prácticas sustentables son instrumentos de competitividad. La Responsabilidad social es una herramienta que ayuda a ser competitivo, y la sustentabilidad es la manera de ser más competitivo en estos momentos.

Las reglas pasadas incluían instrumentos como publicidad o marketing. Y se ha utilizado de mala manera la responsabilidad social como una estrategia de marketing vacío o de lavado de cara, dañando a su vez la imagen de la Responsabilidad social y levantando cejas acerca de los beneficios que esta puede contribuir. Pero aun estas malas prácticas demuestran que la responsabilidad social es un tema que está en boca de todos. Y lo será todavía más con el paso de los años y será cada vez más necesario para todas las entidades del planeta, sean empresas, entidades de gobierno, sociedades y generaciones futuras. 

Cuando se habla de la Responsabilidad social comúnmente se hace referencia a los siguientes términos: sustentabilidad, derechos laborales, respeto al entorno, preocupación por el futuro, prácticas éticas, ecología, usos eficientes del agua y de la energía, gobernanza corporativa, integración social-ambiental, derechos de los animales y muchas otras cosas más.

Todos estos aspectos son importantes para la Responsabilidad social pero no son ni novedosos ni es gratuito que se hable de ellos ahora. De ecología se ha hablando desde hace décadas e igualmente dede hace tiempo se conocen las llamadas Buenas prácticas empresariales. Sin embargo es ahora que todos estos temas toman especial y más profunda conexión. Es ahora que finalmente se interrelacionan en un momento que el mundo, el mercado, está dispuesto a beneficiar a aquellas empresas que deseen resarcir los daños generados, evitar impactos negativos y regenerar procesos dañados. Este es el mundo de la Responsabilidad social.